«No molestes el final de la apariencia. El único emperador es el emperador de los helados».
Después de leer El misterio de Salem´s Lot y engancharme a esta gran obra, más de intriga que de terror no he podido resistir la tentación de ver las dos películas aún a sabiendas que siempre decepcionan las películas basadas en libros que ya hemos leído.
La primera se puede considerar una rareza de la época de 1979 con personajes absurdos, como Straker que en el libro es un tipo siniestro, con la cabeza afeitada y de aspecto imponente que hiela la sangre y en la película es un «abuelete» con el pelo engominado y aspecto debilucho. Nada hay que decir de la mezcla que hacen de las situaciones y adjudican tramas a personajes entrelazados que nada tienen que ver con el libro, vamos un desastre.Solo se salva David Soul «Ben Mears» que da bastante el pego.
La segunda de 2004 y con Rob Low como actor principal «Ben» y con Donald Sutherland haciendo de Straker, está más conseguida y parece que intenta dar un pelín de miedo aunque no lo consigue del todo, ya que los vampiros son bastante ridículos y no hay grandes efectos en las mordeduras y parones donde de verdad está la acción.